El tener sensación de hambre constante o el no lograr a corto plazo los resultados perseguidos puede provocar frustración a la hora de seguir una dieta. Para llevar a cabo una dieta de forma adecuada es fundamental pensar a largo plazo y tener claro que se trata de un cambio de mentalidad y de hábitos de vida más que de una modificación temporal en la nutrición.

Respecto al momento óptimo para comenzar una dieta, lo ideal es prepararse mentalmente antes de comenzar, “cuando uno tiene claros los motivos por los que la realiza y cuando el ambiente laboral o personal es favorable”. Esto es importante porque el estado psicológico influye notablemente a la hora de afrontar una dieta, ya que para mantener una alimentación equilibrada y establecer unas rutinas de ejercicio adecuadas es necesario no obsesionarse. Tanto es así que “en ocasiones puede ser esencial complementar la labor del nutricionista con la de un psicólogo que ayude a gestionar las emociones”.

Hay que “querer” empezar una dieta, en muchos casos, estas implican verdaderos cambios en la vida de una persona y es fundamental sentirse preparado. Para ello, por un lado es conveniente hacerse con las herramientas necesarias (nutricionista, psicólogo) y por otro, llevar a cabo una verdadera toma de decisión en la que la persona identifique claramente los motivos por los que desea realizar la dieta y establezca objetivos factibles consigo mismo, ajustados a la realidad, para evitar una frustración innecesaria.

En este sentido, el seguro digital Sanitas Blua pone a disposición de los usuarios la posibilidad de contar con programas de asesoramiento especializados en nutrición para fomentar hábitos de vida saludables, en psicología para mantener el bienestar mental y el apoyo de entrenadores personales para ayudar al usuario a mejorar su condición física.

Asimismo establecer horarios fijos y disponer de tiempo libre para cocinar facilita el proceso a la hora de afrontar con éxito una dieta. “Planificando las comidas y realizando cinco ingestas al día, lograremos cumplir los objetivos de una manera más eficaz”. Del mismo modo, ir al supermercado con la lista de la compra previamente planificada, no saltarse ninguna de las comidas, darle importancia al desayuno para comenzar el día con más energía y disfrutar elaborando platos sanos y diferentes que no hagan caer en el aburrimiento son algunos de los trucos que pueden ayudar a afrontar una dieta con éxito.

En cuanto al ejercicio físico, actividades como el yoga tienen efectos positivos a la hora de reforzar la dieta, dado que “aportan calma y ayudan a superar la ansiedad al realizar movimientos que aceleran el metabolismo y queman nutrientes”. En esta línea, contar con un entrenador personal nos puede ayudar a fijar un orden y adoptar hábitos de vida saludables.

En definitiva, para obtener unos resultados satisfactorios es necesaria una buena dosis de esfuerzo y constancia para no caer en el típico atracón por ansiedad, sin embargo, si esto ocurre, “lo importante es no sentirse culpable y no tirar todo el trabajo realizado por la borda. Hay que asumir, que en el proceso de cambio de hábitos de vida, hay altos y bajos y caben los momentos en que se incumplen las pautas. Es preferible aceptar esto desde el principio y tratar de recuperar la disciplina marcada lo antes posible, cuando esto ocurra. También analizar por qué ha ocurrido e intentar buscar alternativas a situaciones semejantes. Para esto, la ayuda de un especialista es fundamental”.