Deporte, Running

Verdades y mentiras de los suplementos para corredores

Geles energéticos, pastillas de sales, bebidas isotónicas... Cuál tomar en cada momento y cómo elegir según tu deporte y entrenamiento por sus beneficios.

En el deporte se habla mucho de fijar objetivos. Da igual si te estás iniciando en él o si has practicado alguna actividad durante toda tu vida, establecer unas metas te servirá a la hora de enfocar tus entrenamientos, e incluso de tener una razón para moverte. Para alcanzar esos objetivos muchas veces se recurren a ayudas, a los llamados suplementos.

Los suplementos deportivos son sustancias que ayudan al organismo a mejorar, ya sea desde el punto de vista del rendimiento o desde la estética. Hoy en día encontramos suplementos deportivos a base de ingredientes naturales o químicos, pero lo fundamental es tener claro que se trata de productos que ayudan a alcanzar un objetivo. Dicho de otra manera, su consumo no sustituye una alimentación sana y tampoco es determinante para los resultados del deportista.

Sin embargo, la presencia de suplementos de todo tipo no ha hecho más que aumentar en supermercados y grandes almacenes: batidos de proteínas, bebidas isotónicas, barritas o geles energéticos, pastillas para las articulaciones… por eso, habrá quien puede llegar a comprarlos poniendo parte de su fe en este tipo de productos. En el caso de los corredores, veamos cuáles hay y qué podemos esperar de algunos de los suplementos deportivos más vendidos en el running.

Qué suplementos existen para corredores

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Las necesidades de un corredor distan mucho de las de un deportista que realiza una actividad anaeróbica, como puede ser el entrenamiento de pesas, o incluso dista de alguien que practica gimnasia suave como el yoga y el pilates. El corredor, sobre todo el de distancias medias y largas, necesita una fuente alta de carbohidratos para que le provea de energía suficiente para rendir en sus tiradas. Estos son:

Bebidas isotónicas

Popularmente conocidas por deportistas y no deportistas. Esta fuente de hidratación es rica en azúcares, sodio, potasio y cloro. Se puede consumir antes, durante y después de la carrera.

El objetivo es reponer los electrolitos que el organismo pierde durante la práctica deportiva y ayudar a su recuperación. ¿Son imprescindibles? Lo cierto es que no. Tanto los minerales como la energía que aporta se pueden obtener mediante una alimentación sana.

Geles

Estos productos suelen verse en las carreras populares de media y larga distancia. Se trata de un líquido viscoso, que viene envasado en un plástico para facilitar su toma durante la carrera. Se puede encontrar de distintos sabores y texturas, pero el objetivo siempre es el mismo: proporcionar un chute de energía al corredor, por lo que suele estar compuesto de glucosa.

Muchos se preguntan cuándo hay que tomarse un gel. La recomendación más general es que si vas a correr durante más de una hora, entonces puedes meter un gel. También es importante que antes de una competición, hayas probado en alguna de tus tiradas largas el gel que vas a utilizar. Es muy común que algunos no le sienten bien a tu estómago.

Ahora bien, ¿es necesario como fuente de energía durante la carrera? Aunque su uso es muy extendido, hay corredores que apuestan por alimentos naturales, como por ejemplo un puñado de pasas, que también te puede proporcionar el mismo tipo de energía en la carrera.

Barritas y pastillas energéticas

A diferencia de las barritas que se suelen encontrar en las máquinas de vending del gimnasio, las barritas energéticas para corredores suelen tener un alto contenido en carbohidratos y menos en proteínas. Una vez más, los azúcares son la principal fuente de energía del deportista que se prepara para carreras. Sin embargo el uso de barritas no es tan popular como el de los casos anteriores.

Las pastillas energéticas son más conocidas entre quienes realizan trails y ultras. Se trata de gominolas de distintos sabores y fáciles de transportar en una mochila o un cinturón. Se trata de una alternativa más a la hora de obtener energía durante la carrera.

Los suplementos que hemos visto hasta el momento se caracterizan porque se suelen consumir mientras se hace deporte. Correr genera un desgaste para el organismo, y este es importante cuando el deportista se está preparando para una distancia larga.

Multivitamínicos

Este no es un suplemento propio de los corredores, pero sí de los pocos que se consumen sin estar limando la zapatilla. Los multivitamínicos se suelen presentar en cápsulas o tabletas y su objetivo es tratar posibles deficiencias.

Es importante tener presente que el consumo de vitaminas solo se debe producir cuando existe una falta de ellas. No se va a mejorar el rendimiento por tomar vitaminas que el cuerpo no necesita. Por eso es importante que antes de tomar cualquier vitamínico, te asegures a través de un análisis de sangre de que en tu organismo existe una carencia. De lo contrario, estarás tirando el dinero.

Cómo elegir los suplementos deportivos para correr

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Sin duda, los suplementos deportivos están al alcance de todo el mundo. Antes de coger uno y meterlo en la cesta de la compra es importante revisar su composición. De hecho, es una buena práctica la de acostumbrarse a leer las etiquetas de los productos que compras para saber qué es lo que realmente te están vendiendo.

Es posible que un producto se anuncie como alto en proteínas o en carbohidratos, y después en la etiqueta compruebas que sí contiene estos macronutrientes, pero su proporción no es significante en comparación a otros productos o alimentos que podrán aportarte más.

Otro punto importante es preguntarte si realmente hace falta consumir ese suplemento. Los factores que más determinan los resultados en el deporte dependen de cómo entrenas, cómo nutres tu organismo y cuánto descansas para rendir más y mejor. Hay situaciones como el estrés que pueden empeorar tu rendimiento, por lo que tomar vitaminas puede no ser la respuesta. Al final, el consumo de suplementos es el último escalón, una vez estás haciendo bien todo lo demás.

Un último punto, pero no menos importante es el de acudir a un profesional sanitario para que te asesore sobre si necesitas o no consumir un suplemento. En caso de ser así, el sanitario te indicará cuál consumir. Para ello, será imprescindible hacerse un análisis de sangre, ya que es la única manera de saber si tienes deficiencias. Además, hay mejoras que se pueden llevar a cabo por medio de la dieta, por ejemplo, aumentando el consumo de frutas y verduras por medio de batido. De esta manera no tendrías que invertir más dinero en la compra de productos que no necesitas.