No renunciar a la actividad física es, sin lugar a dudas, una de las formas más saludables de pasar el verano. Por suerte, hay actividades que nos invitan a movernos y una de las más aclamadas durante los meses estivales es el Paddle Surf. Un deporte acuático que lo pueden practicar personas de todas las edades en prácticamente cualquier sitio: playas, lagos, ríos, embalses e incluso piscinas.

Qué es el paddle surf

A simple vista, el paddle surf (también llamado surf de remo) es fácil de reconocer porque se trata de un deporte donde el practicante se equipa de una pala para remar y una tabla más grande que la de surf para ponerse de pie. El paddle surf de travesía es la actividad más habitual en verano, ya que consiste en remar para recorrer un tramo de la costa.

De hecho, son muchos los que aprovechan las posibilidades que da el paddle surf de descubrir parajes nuevos a lo largo de la costa como cuevas y calas a las que no se podría acceder de otro modo. Debido a la inversión económica que requiere hacerse con un equipo propio, para iniciarse en el paddle surf basta con acudir a las empresas que alquilan los equipos y que posiblemente también organicen rutas interesantes.

También se ha popularizado el llevar a cabo otras actividades encima de una tabla de paddle surf como son el yoga o el pilates. El objetivo de ambos es disfrutar del entorno que otorga la práctica de estas disciplinas en medio de la naturaleza, añadiéndole una dificultad: el equilibrio que requiere cada una de las posturas que se ha de adoptar, ya que en caso de perderlo, caerías en el agua.

Beneficios del surf de remo

Como hemos visto, el paddle surf es un deporte en el que es difícil aburrirse. Pero además de la diversión, hay una serie de beneficios a nivel físico y mental que notarás en cuanto te equipes de una pala y una tabla para surcar los mares.

• Trabajas la estabilidad y el core: uno de los primeros temores a la hora de subirse a una tabla de paddle surf es el de poder mantenerse en equilibrio. Es habitual que al tratar de ponerse de pie, mucha gente acabe en el agua. ¿El truco? Activar el core, flexionar ligeramente las rodillas para que el centro de gravedad esté más cerca de la tabla y mirada al frente, porque si miramos a la tabla es más fácil caerse.
• Fortalece el tronco: una vez se controla la estabilidad, el siguiente paso es remar. Un movimiento que debe nacer de la faja abdominal y que te hará trabajar los miembros superiores. Es muy normal que aparezcan agujetas tras tu primera travesía.
• Aumentas el gasto de calorías: como ya hemos dicho, esto es importante a la hora de pasar unas vacaciones saludables y de mantener la actividad física en verano. En este punto, no hay que olvidar que el surf de remo es una actividad aeróbica que exige beber agua cada cierto tiempo, sobre todo, si se va a realizar una travesía superior a una hora.
• Reduce el estrés: la sensación de libertad es máxima cuando estás remando encima de la tabla, con el viento a favor y la brisa en la cara. Un beneficio propio de las actividades que se practican al aire libre. Además, es un deporte en el que la intensidad la marca el practicante, por lo que siempre que necesites descansar podrás dejar de remar o si necesitas refrescarte, solo tendrás que tirarte al agua.

Consejos para practicar paddle surf de forma segura

Dicen que las mejores horas para practicar paddle surf son aquellas en las que el mar está en calma, ya que podrás navegar sin la dificultad que añade el cómo está la marea en ese momento. Por eso, hay quien prefiere aprovechar la primera hora de la mañana o la última de la tarde para hacer paddle surf. Independientemente del momento del día, es fundamental el uso de protección solar para la piel.

Esa protección ha de elegirse en función del tipo de piel, pero también ha de ser resistente al agua, ya que es probable caerse al agua durante la práctica o incluso refrescarse porque hace mucho calor.

Esta recomendación está ligada a uno de los segmentos de población en los que está contraindicado el paddle surf: las personas con hipotensión. Y es que se trata de una actividad en la que se está largos periodos de tiempo expuesto al sol, por lo que las personas que tienen la tensión baja han de extremar las precauciones en este deporte.

También han de ser precavidos quienes tienen más riesgo de padecer hipoglucemia (diabetes), ya que un descontrol de los niveles de glucosa durante la práctica puede conllevar desmayos. Para estos dos últimos casos, es mejor practicar paddle surf acompañado de alguien que pueda socorrer en caso de que el practicante se empiece a sentir mal.

Por último, aunque se sepa nadar, también es recomendable ponerse un chaleco salvavidas, sobre todo, en el caso de que niños o personas mayores vayan a realizar una travesía larga. Hay que recordar que al practicar una actividad deportiva en un entorno natural se asome el factor incertidumbre, que es aquel en el que las condiciones climatológicas o del lugar pueden cambiar de un momento a otro. Nunca se sabe cuánto se puede necesitar un chaleco salvavidas cuando estás navegando en el mar.