Raro es que pase un tiempo sin que se exalten las propiedades de un alimento que ha sido importado desde un lejano rincón del planeta. En los últimos tiempos, el té matcha ha entrado en el grupo de lo que habitualmente se conoce como “superalimento”. Dícese de un alimento que reúne propiedades extraordinarias y de las que, supuestamente, te beneficiarías si lo consumieses.

Los llamados “superalimentos” siempre tienen una historia detrás. Por ejemplo, puede que estén sacados de una plantación que sólo se encuentra en lo más profundo de una selva, o que sea un alimento milenario que lo consumían tribus longevas.

El caso es que, lo que supuestamente tiene un “superalimento”, no lo encontrarás en los alimentos que crecen en tu entorno, motivo por el que los productos denominados “superalimentos” tienen un coste alto. Hay que señalar que todo esto son técnicas de marketing bastante efectivas a juzgar por cómo se disparan las ventas de estos productos.

Algunas publicaciones en medios de comunicación y redes sociales han contribuido a que este brebaje verde traído de Japón se haya puesto de moda, en parte gracias a algunos de los beneficios que se le atribuyen como sus efectos antioxidantes.

Cómo se prepara el té matcha

El té matcha se hace a partir de las hojas de té verde convencional. Las hojas son recolectadas a mano de unos arbustos de té que han crecido en unos cobertizos de tela semitransparente para conservar una textura y un sabor particulares. Tras la recogida, las hojas se hierven en agua, así se evita su oxidación, y se dejan envejecer para ser trituradas al cabo de unos meses.

Té matcha significa “té en polvo”. Precisamente, el polvo verdoso es lo que se utiliza para su preparación. Se vierte una cucharilla de este polvo en una taza con agua caliente (80 grados) y se remueve con un instrumento llamado chasen cuyas cerdas son se bambú. Como ves, preparar té matcha es una ceremonia más propia de sociedades como la nipona que de las occidentales.

Así es como se toma el té matcha en forma de infusión, sin embargo, cada vez es más habitual encontrar este alimento en otras preparaciones como en batidos, helados o incluso en bizcochos.

Beneficios e inconvenientes del té matcha

Basta una breve búsqueda del té matcha en Internet para leer que al tomarlo, nos estaríamos beneficiando de los siguientes efectos:

• Potente antioxidante
• Antiinflamatorio
• Depurador del organismo
• Reduce el colesterol malo
• Regula el metabolismo
• Protege de patologías cardiovasculares

Como ya hemos dicho, el té matcha no es más que hojas de té verde trituradas tras una minuciosa recogida y meses de conservación. Resulta curioso que este alimento se haya elevado a la categoría de “superalimento” cuando proviene de una fuente que llevamos años consumiendo.

Los beneficios del té matcha son los mismos que el té verde, aunque hay un estudio de 2003 del que se extrae que el matcha es 137 veces más potente en antioxidantes que el té verde convencional. Lo cual convertiría al matcha en un tóxico más que en una bebida saludable.

Cierto es que el té verde ha demostrado en numerosos estudios que su consumo aporta propiedades muy positivas gracias a la presencia de una de las catequinas más potentes que tiene: el EGCG, cuyas investigaciones reflejan que ayuda en la oxidación de grasas, mejora la sensibilidad a la insulina y regula el azúcar en sangre, entre otros.

Sin embargo, cuando se atribuyen propiedades a un alimento se deja atrás un factor que no deja de ser importante para que su consumo sea beneficioso: la cantidad en la que empieza a hacer efecto.

Si buscamos los beneficios de la catequina EGCG, en una taza de té verde convencional estaríamos consumiendo 80 miligramos de EGCG. En una de té matcha, poco más de 10 miligramos, ya que solo se utiliza un gramo de este polvo verdoso. Para, por ejemplo, beneficiarse de la oxidación de grasas, los investigadores determinaron que se necesita consumir entre 400-500 miligramos al día. Las cuentas no salen, ya no solo por la cantidad de té matcha que deberías beber, sino por lo cara que es esta bebida.

¿Tomar o no tomar té matcha?

El mensaje que debería calar es que la etiqueta “superalimento” oculta una técnica de marketing que beneficia más a la industria o a los bolsillos de las marcas que comercializan el “superalimento” en cuestión. En el caso del té matcha, no es que su consumo se desaconseje, es que una taza de este brebaje no es una fuente de salud que no vas a encontrar en otras infusiones o alimentos al alcance de todos los bolsillos.

No obstante, el té matcha es una bebida con un sabor particular que gusta a muchas personas. Si es tu caso, entonces es ideal para preparar con batidos de frutas o como infusión para incorporarlo en tu alimentación durante los meses de invierno. Sin duda, tomar té matcha será mucho más sano que recurrir a bebidas preparadas como los zumos o refrescos envasados con azúcares añadidos.

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