Envejecimiento, Salud

Cuando eres abuelo: ventajas y desventajas de cuidar de los nietos

La aportación de los abuelos es muy valiosa, pero hay que evitar sobrecargarlos de tareas para que no se resienta su salud.

No es fácil conciliar la vida laboral y familiar en España, de modo que son muchas las parejas que recurren a los abuelos para que se hagan cargo de sus hijos mientras están trabajando. Una realidad social que queda reflejada en los datos: uno de cada cuatro abuelos cuida de sus nietos en nuestro país, a los que dedican una media de siete horas diarias, dos más que el promedio europeo, según la Encuesta de Salud, Envejecimiento y Jubilación en Europa (SHARE, por sus siglas en inglés).

Se da la paradoja de que, a pesar de que los abuelos son un colectivo potencialmente receptor de cuidados, al mismo tiempo son cuidadores de otras personas dependientes, aunque sea temporalmente, como sus nietos.

Es indudable que tener a los abuelos cerca es muy beneficioso para los niños por diversas razones, pero el cuidado de los nietos puede generarles estrés, ansiedad o depresión si se ven sobrecargados de actividades y responsabilidades, algo que puede agravar sus dolencias y hacer que descuiden su salud. Veamos a continuación cuáles son los principales pros y contras.

¿Qué ventajas tiene para los abuelos cuidar de sus nietos?

  • Mejoran su estado de ánimo. En compañía de los nietos, se sienten rejuvenecidos por la energía, la vitalidad y la alegría que estos les insuflan.
  • Están más activos. Ir al parque, jugar con ellos, leerles cuentos, hacer pasatiempos, ayudarles en los deberes… Estar con los nietos les permite mejorar su estado físico, pero también el mental al acrecentar su rendimiento cognitivo y el manejo de las nuevas tecnologías.
  • Se sienten útiles. Cuidar de los nietos les otorga un papel protagonista en la dinámica de la familia, lo que les hace sentirse imprescindibles para el buen funcionamiento de la misma, aumentando su autoestima y dejando de lado la sensación de soledad.
  • Refuerzan los lazos familiares. Aportan a los nietos la idea de continuidad y evolución de la familia, con la transmisión de experiencias, historias, anécdotas, tradiciones, costumbres y valores familiares y culturales, posibilitando que no se pierda el pasado.
  • Se convierten en personas de confianza con las que comunicarse. La cordialidad y el nivel de confidencia que llegan a establecer los abuelos con los nietos es muchas veces mayor que el que tienen con los padres. Este vínculo afectivo es muy importante para el desarrollo emocional y psicológico de los niños: saben que cuentan con una persona en la familia con la que comunicarse con confianza, pedir consejo e incluso hablar de asuntos que no se atreven a compartir con los padres. Los abuelos suelen tener la experiencia y la paciencia para escucharlos y aconsejarlos bien.

Ventajas y desventajas de cuidar de los nietos

¿Qué desventajas tiene para los abuelos cuidar de sus nietos?

  • Pueden aparecer conflictos graves entre los abuelos y sus hijos por las diferencias de criterio entre unos y otros a la hora de criar a los niños y tomar decisiones sobre su educación y cuidado.
  • Sentimientos de celos encubiertos y competitividad de los padres hacia los abuelos con respecto a sus hijos debido a que los abuelos están más horas diarias con los niños, comparten más actividades y logran una mayor confianza con ellos.
  • En ocasiones, la responsabilidad de cuidar a los nietos resulta agobiante para los abuelos, limitándose su libertad, pero no se quejan porque piensan que es su obligación. Si bien es cierto que en la mayor parte de los casos esta actividad se hace de forma voluntaria y con agrado, también lo es que, en algunos casos, las abuelas y los abuelos tienen la sensación de realizar una jornada laboral a tiempo completo y se ven sobrecargados de tareas y responsabilidades.

Para evitar que el cuidado de los nietos se convierta en un problema, desde la Sociedad Española de Geriatría y Gerontología (SEGG) recomiendan que los mayores rechacen asumir más cargas de las que les corresponden, desarrollando únicamente las tareas de las que se vean capaces y reservando un espacio propio para sus cuidados y ocio. Además, es importante que pongan unos límites, tanto a los padres como a sus hijos, para que el tiempo que pasen con los nietos sea lo más gratificante posible.