De hecho, con frecuencia son los familiares y amigos los primeros en darse cuenta de que algo no va bien, mientras que el adicto suele ser incapaz de reconocer que tiene un problema.

Sin embargo, muchos adictos se sienten aislados, marginados e incluso abandonados por parte de sus familiares y amigos, lo que dificulta mucho que puedan tomar la decisión de buscar ayuda. Y es que convivir con una persona con problemas de adicción no es fácil y en ocasiones no sabemos cómo ayudarle y persuadirle para que tome la decisión de abordar su enfermedad.

El apoyo y comprensión de la familia y el entorno más cercano son fundamentales para ayudarle a pedir ayuda y a seguir un tratamiento. Por ello, a continuación te ofrecemos algunas pautas útiles sobre cómo puedes apoyarle:

• Infórmate lo máximo posible sobre el tipo de adicción que sufre, la sustancia que consume y cuáles son sus consecuencias tanto en términos de salud como sociales
• Habla abiertamente del problema y escúchale sin juzgarle aunque no comprendas o compartas las razones con las que pretende explicar su adicción
• Muéstrale tu preocupación sobre cómo se está comportando y el impacto que el consumo de drogas está teniendo en su entorno. Para ello, es bueno que apuntes los hechos que ocurren en momentos críticos y que puedan ponerle a él o a otras personas en peligro (p.ej. conducir en dirección contraria bajo los efectos de las drogas, peleas o episodios violentos…)
• Explícale que tiene una enfermedad y que necesita ayuda terapéutica. Hazle ver que necesita acudir a un centro especializado en el tratamiento de adicciones, donde un equipo multidisciplinar de profesionales médicos podrá determinar cuál es la intervención psicoterapéutica y farmacológica más adecuada para ayudarle a abandonar la adicción. Si es necesario, ofrécete a acompañarle a la primera consulta para que se sienta arropado
• Así como un adicto es incapaz de controlar su adicción, tú tampoco podrás controlarla. Por ello, no te frustres si rechaza tus sugerencias y recomendaciones para buscar ayuda profesional. Insiste sobre esta idea cada vez que puedas y recuérdale que estarás a su lado siempre que te necesite
• Si inicia un programa de rehabilitación, déjale claro que le apoyarás durante todo el proceso de desintoxicación y también después, cuando inicie una nueva vida sin adicciones

Pero sobre todo, recuerda que los problemas de adicción no se solucionan de un día para otro, sino que requieren de tratamientos largos, que se prolongan meses e incluso años. Prepárate para prestar toda la ayuda necesaria durante este difícil proceso.