Si tuviéramos que elegir un momento del año en el que se teme más a la báscula es, sin lugar a dudas, el de las fechas navideñas. Prácticamente nadie se escapa de las citas y compromisos sociales que tienen lugar alrededor de una mesa llena de abundante comida y bebida. Por eso, seguir haciendo ejercicio en Navidad resulta fundamental no solo para librarse de los kilos de más en enero, sino también porque hay razones de sobra para aprovechar las fiestas para ejercitarse.
Evitar la pérdida de forma física es uno de esos motivos por los que seguir moviéndose en Navidad. Hay algunos estudios que sugieren que no hagamos un parón de actividad física si no queremos ver cómo afecta la falta de ejercicio a nuestra masa muscular, la cual se reduce al mismo tiempo que se incrementa la masa grasa en el organismo.
Los efectos de no seguir haciendo ejercicio se notan antes en individuos entrenados (más si son deportistas de competición). Dependiendo de la fuente que se consulte, se estima que se necesitan 12 semanas para perder aspectos como la fuerza, mientras que algunos estudios hablan de 31 semanas.
Otras cuestiones por las que podemos y debemos seguir sudando la camiseta en diciembre son:
- Más tiempo para hacer deporte: diciembre es un mes lleno de festivos. Muchos los aprovechan para hacer una escapada y pasar tiempo con la familia. Si es tu caso porque estás de vacaciones, tienes la oportunidad de aprovechar una hora al día para practicar cualquier tipo de ejercicio físico, así como de apuntarte a eventos deportivos que solo se celebran durante estas fechas como la última carrera del año, la San Silvestre.
- Más posibilidades para compartir el deporte: en vez de quedar para tomar algo o comer, ¿por qué no propones jugar un partido de pádel a tus amigos? En el caso de tener momentos que compartir con la familia también vale ir juntos a andar o escaparos un rato al gimnasio.
- Buenas fechas para practicar actividades de invierno: es recomendable cambiar de disciplina deportiva para que, una vez pasadas las fechas, vuelvas al deporte que practicas normalmente con más ganas y habiendo trabajado otros aspectos físicos que no sueles ejercitar. El esquí, el patinaje sobre hielo o el snowboard son algunas de las disciplinas que más se practican en invierno.
Hacer ejercicio en Navidad para evitar engordar
Navidad y excesos en las comidas suelen ir de la mano. Se prevé que durante las fiestas engordemos entre tres y cinco kilos. Curiosamente, un estudio publicado en New England Journal of Medicine demostró que nuestra percepción de cuánto engordamos en las fiestas navideñas es mayor a los kilogramos que realmente cogemos.
Los investigadores de ese análisis preguntaron a un grupo de individuos cuánto peso estimaban que iban a aumentar durante las navidades. Las previsiones oscilaron desde dos a cinco kilos. Se les pesó antes y después de las fiestas, y los autores observaron que de media engordaron medio kilo. El estudio también arroja un dato revelador: los que más kilos cogieron fueron los que ya tenían sobrepeso antes del experimento.
Esto no es una invitación a que comamos todo lo que se nos ponga delante, más bien todo lo contrario: es aconsejable llevar a cabo algunos trucos a la hora de sentarnos en la mesa, como comer fruta de postre o bien consumir verduras en los aperitivos. Y por supuesto, también es preferible que no solo hagamos actividades deportivas como las mencionadas antes, sino que nos mantengamos activos. Cuanto más nos movamos, más evitaremos engordar durante las fiestas. Una caminata a ritmo suave después de comer o ir a hacer la compra caminando son fórmulas que funcionan y que terminan reflejándose en la báscula.
Patricia