La Sociedad Española de Ginecología y Obstetricia recomienda hacer esta prueba a partir de los 25 años o 3 años después del inicio de las relaciones sexuales y repetirla en las sucesivas revisiones ginecológicas. Dependiendo del resultado de la misma, se hará de forma anual o se espaciará en el tiempo durante unos tres años.

 ¿Es molesta la citología?

Pero no te asustes, se trata de una prueba totalmente indolora y en la misma exploración se puede realizar la determinación del virus del papiloma, que se recomienda cada 3-5 años a partir de los 30 años.

En caso de que alguna de estas pruebas salgan alteradas tu ginecólogo te puede recomendar la realización de una colposcopias y una biopsia del cuello. Ambas se realizan en la consulta y no precisan anestesia.

Tienes que tener en cuenta que no debes mantener relaciones sexuales los dos días previos a hacerte la citología, ni usar cremas vaginales, óvulos o espermicidas. Si tomas anticonceptivos orales u otro tipo de fármacos debes decírselo a tu médico, al igual que si crees que puedes estar embarazada. Tampoco debes hacerte la prueba si tienes la menstruación. Debes esperar para hacerte la citología entre cuatro y cinco días después del último día de la regla, porque sino las células que se recogen no servirán.

No te tienes que dejar llevar por la pereza, por la vergüenza ni posponer esta prueba. Es importante acudir a un especialista en ginecología y realizarse revisiones ginecológicas anuales, ya que cualquier pequeña lesión que se detecte a tiempo puede evitar complicaciones mayores.

La importancia de la prevención

Una vez más, la prevención es muy importante y se obtiene acudiendo al ginecólogo para hacer las revisiones anuales establecidas en los protocolos de asistencia y siguiendo las recomendaciones que te hagan respecto a vacunación, anticoncepción de barrera, enfermedades de transmisión sexual, etc.