Una vez tengamos elaborado el plan de comidas semanales, el siguiente paso es elaborar la lista de la compra, donde aparecerán todos los ingredientes necesarios para elaborar tus menús.

Recuerda que es importante tener en cuenta el número de comensales finales de cara a comprar las cantidades necesarias y que no te quedes corto cuando empieces a elaborar los platos elegidos. Esto te permitirá además evitar que haya excedentes de comida.

Ya con la lista en mano, la mejor opción, siempre que sea posible, es hacer la compra en mercados locales, donde el producto es fresco y muchas veces de cercanía.

Recomendable también evitar ir a hacer la compra con hambre, ya que es probable que eches en la cesta más productos de los que habías pensado comprar, entre ellos snacks poco saludables o dulces navideños como turrones o polvorones. 

Colocación de la compra

Una vez realizadas tus compras, hay una serie de recomendaciones sobre la manera de colocar la comida en la despensa.

Los snacks o dulces que reservamos para días señalados, los colocaremos en un cajón o estante donde no estén a primera vista, para evitar tentaciones diarias.

En la nevera, que suele estar más llena durante la época navideña, se debe evitar la contaminación de alimentos cruzados, que es aquella donde se mezclan los alimentos frescos con los ya preparados.

Una manera óptima de organizara sería la siguiente:

• En las bandejas superiores colocaremos los alimentos preparados o los tuppers ya listos, debidamente convservados.
• En el siguiente estante colocaremos los lácteos y embutidos, que suelen venir envasados. Esto evitará que puedan contaminarse si se derramara algún envase del estante superior.
• En la siguiente bandeja pondremos los productos frescos como carnes y pescados, que deben estar envueltos o tapados y colocados en recipientes con escurridor, ya que suelen soltar jugos.
• En último estante, que suelen ser un cajón, colocaremos las frutas y verduras.