La dieta scardale fue diseñada por un cardiólogo llamado Herman Tarnower. La característica principal que distingue a esta de otras dietas es que permite disfrutar de alimentos variados y en suficiente cantidad como para no pasar hambre. A continuación, te explicamos más acerca de su funcionamiento.

Por qué funciona la dieta scardale

El secreto de esta dieta está en que se reduce al mínimo la ingesta de grasas y carbohidratos, principales responsables del aumento de peso. Sin embargo, se pueden consumir abundantes alimentos como frutas, verduras y otros con alto contenido en proteínas, una vez superada la primera fase de 14 días.

Por otro lado, las grasas existentes van desapareciendo porque el organismo se acelera y se consumen. El aceleramiento tiene lugar de manera natural, por el cambio en la manera de comer.

¿Cómo se hace la dieta scardale?

La duración de esta dieta es indefinida, aunque sí tiene una fase inicial y otra secundaria. La primera parte es más restrictiva y consigue resultados sorprendentes en tan solo 14 días, sin que el cuerpo sufra ningún daño. Durante este periodo, hay que mantener una ingesta de 1.000 calorías diarias. No se puede prolongar por más de dos semanas, ya que se convertiría en algo perjudicial para el cuerpo.

Una vez transcurridos los 14 días se pasa a la segunda fase. Sirve para mantener los resultados obtenidos y evita la aparición de grasas no deseadas en el organismo. A diferencia de la primera fase, esta dieta es mucho menos restrictiva y permite la ingesta de mayor cantidad de alimentos, tantos como se necesiten para saciarse pero respetando siempre la regla de no ingerir productos prohibidos.

Primera fase de la dieta scardale

En el primer periodo hay que conseguir no exceder las 1.000 calorías diarias. Para que funcione correctamente has de hacer tres comidas diarias. También tienes que respetar la regla de no consumir alimentos prohibidos, como el alcohol, el azúcar, las bebidas gaseosas, las bebidas alcohólicas y nada que contenga grasas. El agua es fundamental, así que bebe dos litros al día. Durante este tiempo no debes hacer ejercicio. Y recuerda no prolongar la fase de la dieta por más de 14 días.

Puedes diseñar tu propio menú con una tabla de calorías. Una sugerencia es que por la mañana tomes una pieza de fruta, café solo, una rebanada de pan integral, galletas integrales o similares. A medio día come ensalada, huevos cocidos, queso desnatado, algún embutido o algo similar como plato principal, y café o té de postre. Para cenar prepara una carne magra, pollo o pescado a la plancha, acompaña con ensalada o verdura, y de postre fruta y café o té, pero siempre respetando las 1.000 calorías.

Segunda fase de la dieta scardale

Tras los 14 primeros días se puede comer más cantidad de comida, evitando siempre los productos prohibidos, como el azúcar, el alcohol y las grasas. Puedes aumentar las porciones de proteínas, frutas, verduras y lácteos desnatados. Si en algún momento te dejas llevar y notas que vuelves a aumentar el peso, puedes repetir los 14 días, pero siempre que haya pasado un tiempo prudente. No es bueno repetirla, lo mejor es un correcto mantenimiento. Y si un día cedes a la tentación, no te preocupes, continúa con el mantenimiento como siempre y ya está.

Antes de llevar a cabo ninguna dieta, consulta con tu médico para que haga una revisión. La dieta está preparada para personas totalmente sanas y sin necesidades especiales.