Como si de un ingrediente más de nuestra dieta saludable se tratase, todos deberíamos incluir algún juego de memoria y lógica en nuestras rutinas; especialmente cuando va avanzando nuestra edad. A continuación, te mostramos varios ejercicios de memoria para estimular la mente y, de esta manera, evitar problemas futuros.

¿Cómo estimular la mente? Ejercicios de memoria

La demencia en nuestros mayores y, por ello, estimular la mente con ejercicios que ayuden a la capacidad de recordar se hace imprescindible en ellos. Además se trata de ejercicios sencillos que todos podemos practicar. Pero, ¿cuáles son?

• Fichas de datos. Se trata de crear fichas con preguntas a responder o frases y palabras a completar que ayuden a ejercitar el recuerdo.
• Repasos diarios. Dedicar unos minutos durante el día a recordar todo lo que hemos hecho, nos permite ser más conscientes de todas nuestras acciones (y seguro a acordarnos de algo que habíamos olvidado).
• Juegos tradicionales de mesa. Juegos como el parchís y la oca también son útiles para estimular la cognición. Y, por supuesto, cualquier otro juego de mesa o de cartas.
• Ejercicio físico. Moverse también ayuda mentalmente, por lo que practicar algún deporte, aunque sea de forma moderada, o andar un rato cada día se hace imprescindible.
• Sopas de letras o de número. Localizar las palabras escondidas en el tablero o cuántas veces se repite un número sobre él nos obliga a potenciar toda nuestra atención.
• Dibujo. Dibujar siempre es una gran forma de estimular nuestro cerebro. En el caso de las personas mayores, se le puede proponer completar dibujos predefinidos o a través de la unión de puntos.

• Relaciones de objetos. Presentar en un papel diferentes objetos, ya sea en imágenes o en texto, y buscar la relación entre ellos indicando por ejemplo cuál sobraría o cuál se repite es un ejercicio sencillo y eficaz.
• Descansar. Es el ejercicio menos costoso pero no por ello menos necesario, ya que descansar correctamente hace que repongamos toda nuestra energía y nuestro cerebro funcione de la forma más óptima.
• Recordar posiciones. Ya sea con naipes o con dibujos enfrentarse a una composición de diferentes colores u objetos para después ocultarla e intentar recordar dónde se encontraba cada uno es una excelente práctica.
• Escuchar música.  Es uno de los ejercicios más placenteros y debemos desechar esa idea de que lo que disfrutamos no nos ayuda. Escuchar música también estimula nuestro cerebro.

Acostumbrarse a realizar ejercicios que nos estimulen cognitivamente siempre será una ayuda para mantener sana nuestra memoria. Además también podemos seguir ciertos consejos nutricionales para mejorar nuestra memoria.