Tener la autoestima baja puede hacer que se entre en un círculo negativo y de excesiva autocrítica. Convertirnos en nuestros peores jueces y peores enemigos es lo que se puede conseguir con una baja autoestima, algo que puede hacernos frenar en nuestro camino.

En el post de hoy, queremos darte algunas pautas para que aprendas a fomentar la autoestima en los niños. Durante la etapa de crecimiento, resulta vital que el pequeño tenga una buena relación consigo mismo, por eso, aquí te dejamos estos consejos.

Cómo aumentar la autoestima de los niños: consejos y recomendaciones

Ayudar que un niño tenga una autoestima alta es esencial para conseguir que viva de una forma más plena y satisfactoria. En este sentido, los padres pueden favorecer mucho a la hora de construir una autoestima fuerte y estable en sus hijos. Para ello, bastará con que se sigan algunas pautas como las que indicamos.

Acepta a tu hijo con sus virtudes y sus defectos

Para poder fomentar la autoestima en los niños, resulta esencial que ellos se sientan apoyados por sus padres. Está claro que, muchas veces, no termina de gustarnos la forma de reaccionar o de actuar de nuestros hijos. Pero tenemos que tener algo claro: no son perfectos. Y debemos evitar demandarles la perfección constantemente.

Conviértete en el modelo de tus hijos

Si quieres que tus hijos vivan de forma positiva y con seguridad en ellos mismos, nada mejor que ser un modelo a seguir. Intenta cultivar una actitud optimista de la vida y, con tus actuaciones, dar ejemplo acerca de la superación de los problemas, la resolución de conflictos, el manejo de los imprevistos…

Si le das a tu hijo las técnicas para poder salir de cualquier circunstancia de una forma respetuosa y positiva, conseguirás que esté seguro de sus capacidades y de su manejo de las dificultades de la vida.

Apóyale siempre

Otra de las mejores maneras de poder fomentar la autoestima en los niños es que estés siempre a su lado. Es esencial que tu hijo/a te vea cercano, próximo y que sepa que, en ti, tiene un hombro sobre el que llorar. Es importante que le ayudes a ver y entender diferentes situaciones de la vida porque no siempre tendrá razón.

Pero intenta que aprenda, que comprenda y que acepte sus fallos y errores. Y hazlo todo desde una comunicación constructiva y proactiva que le anime a mejorar como persona.

No le etiquetes

Un error muy común entre los padres consiste en etiquetar a sus hijos. Aunque lo hagan a modo de broma, estas “etiquetas” pueden marcarle muchísimo durante su desarrollo. Por ejemplo, evita decir que tu hijo “es un poco torpe” o que es “no es bueno en matemáticas” porque, si lo vas repitiendo constantemente, al final él se lo creerá y se autolimitará.

Educa sin gritar

Para poder fomentar la autoestima en los niños, es básico que recuerdes que tu papel es el de educador/a. Por tanto, tendrás que armarte de paciencia y aguantarte los gritos o el mal humor cuando se equivoque en algo. Nadie nace aprendido y, los niños, necesitan mucha constancia y recordatorios para que entiendan cómo deben comportarse.

Lo mejor que puedes hacer es educar con una sonrisa. Cuando tu hijo se equivoque o haga algo mal, no le grites. Ponte serio, siéntate a su lado y habla con él. No te limites a decirle que “No hagas esto porque está mal”, sino procura que entienda por qué está mal, que él mismo sea capaz de verlo. Y, para ello, no hay recurso mejor que el de la empatía.