Para conocer mejor cómo interactúan estas bacterias con nuestra salud bucal, así como la forma más eficaz de combatirlas, un equipo del centro de investigación Dentaid ha presentado ante la comunidad científica una boca artificial, un modelo de estudio que es capaz de reproducir in vitro la placa bacteriana real.
Hasta la fecha, la única manera que existía para saber cómo actúan las bacterias en diferentes escenarios consistía en solicitar a voluntarios que dejaran de cepillarse los dientes durante un prolongado plazo de tiempo, por ejemplo. Ahora, con esta boca artificial se pueden simular toda clase de escenarios sin necesidad de ello.
La responsable de esta creación, un biofilm oral (un ecosistema microbiano organizado) in vitro, es la microbióloga Vanessa Blanc y su compañero de equipo el doctor Rubén León.
La primera boca española
Los científicos tardaron cinco años en desarrollar lo que se convirtió en el primer modelo de boca artificial en España dirigido a bacterias orales en flujo. Como reproducir el universo de 700 bacterias sería demasiado costoso, los investigadores se centraron solo en seis de ellas, tal y como resume Blanc:
Queríamos estudiar cómo crecen las bacterias en nuestras bocas porque, si crecen mucho, pueden desarrollar patologías. Primero queríamos estudiar cómo se forma el biofilm y luego cómo matarlo […] Tuvimos que hacer una profunda revisión bibliográfica para ver qué bacterias elegir porque depende de cuáles escojas, a lo mejor no se desarrolla el biofilm.
Las posibilidades de experimentar con esta boca y mejorar tanto el conocimiento de cómo actúan las bacterias hasta la forma más eficaz de eliminarlas se abren a partir de ahora. El equipo de microbiología oral de Dentaid ya ha llevado a cabo experimentos hasta con 12 especies de bacterias distintas y ahora están trabajando en nuevos proyectos para estudiar la halitosis.
La boca artificial funciona como una herramienta más para estudiar la evolución de las bacterias, cómo crecen, cómo se desarrollan, cómo interaccionan unas con otras, si los colutorios son capaces de matar ese biofilm y cómo penetran en él.
Consejos básicos para la salud oral
Para mantener una salud bucodental básica hay que, al menos, cepillarse dos veces al día con movimientos cortos, suaves y elípticos, prestando atención a las encías, los dientes posteriores (de difícil acceso) y las zonas que rodean las coronas de los dientes y empastes. Pero lo recomendable es cepillarse los dientes después de cada comida.
El cepillado debe estar complementado con el uso del hilo dental. Finalmente, los colutorios reducen el volumen de la placa y evita patologías e infecciones.
Como mínimo hay que realizarse una limpieza profesional y una revisión bucal una vez al año o periódicamente según se lo indique el odontólogo y/o la higienista.
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