Además de mantener el cerebro activo o controlar nuestros niveles de estrés, la salud cardiovascular se ha mostrado como un factor muy importante a cuenta en nuestra memoria.

Un estudio reciente publicado en la revista Alzheimer Disease & Associated Disorders ha examinado la relación existente entre los riesgos cardiovasculares en la mediana edad y la pérdida de memoria posterior asociada al envejecimiento.

Tu memoria depende de tu salud carviovascular

Para llegar a las conclusiones del estudio, Apar Gupta, del Boston University School of Medicine, y su equipo de colaboradores midieron la salud cardiovascular de un grupo de 1755 personas de una edad media entre 45 y 63 años durante los años comprendidos entre 1991 y 1995.

Transcurridos unos años, concretamente de 2005 a 2008, los investigadores sometieron a aquellas personas a unas pruebas de memoria verbal y de memoria visual. Además, tuvieron en cuenta en su estudio estadístico la relevancia de la presencia del alelo ApoE4, asociado a la enfermedad de Alzheimer.

Los resultados presentaron una poderosa correlación entre las personas que tenían una buena salud cardiovascular y un mejor rendimiento posterior de la memoria. Por el contrario, los que tenían mala salud cardiovascular presentaron resultados más deficientes en las pruebas de memoria.

Concretamente, los que sufrían diabetes cometían más errores en las pruebas de memoria verbal, y los que fumaban cometían más errores en las pruebas de memoria visual.

Cómo cuidar tu salud cardiovascular

Este estudio pone en evidencia, una vez más, que mantener una buena salud cardiovascular no solo tiene efectos positivos en nuestro cuerpo, sino también en nuestro cerebro. Y, aunque en la actualidad gocemos de buena salud, es importante cuidarla desde el principio, pues los efectos nocivos de no hacerlo aparecerán transcurridos los años, cuando ya sea demasiado tarde.

Corazón y cerebro están más cerca de lo que creemos y, desde el principio, hemos de cuidar de ellos, para prevenir futuras enfermedades. A continuación, os dejamos con algunos consejos esenciales para mantener una buena salud cardiovascular:

• Debemos hacer ejercicio aeróbico (tal como caminatas rápidas, trote o ciclismo) por lo menos tres veces por semana durante 30 minutos para fortalecer el corazón.
• Limitar el consumo diario de sal a menos de 2.300 miligramos de sodio.
• La dieta debe consistir principalmente en fruta, verdura, cereales, carnes magras y pescado. El aporte de fibra (cereales integrales, legumbres, frutas) también es muy importante.
• Evitar el exceso de grasas y de alcohol. Fumar ejerce un efecto nocivo sobre el sistema cardiovascular y favorece el riesgo de trombosis.
• Vigilar la tensión arterial. Se considera hipertensión cuando las cifras de la presión arterial están por encima de 140/90 mmHg.
• El estrés también puede dañar las arterias debido a una mayor producción de hormonas y a un aumento del flujo sanguíneo durante la respuesta al estrés.
• A partir de los 40 años es recomendable la realización de revisiones médicas de forma periódica.