Si estamos hablando de que los recién nacidos tienden a agarrar lo que tienen a mano, que como habrás podido comprobar suele ser el pelo o cualquier accesorio que tengan a la vista como pendientes o collares, lo que puede complicar la toma. Por tanto, conjugar la comodidad personal con el cuidado del bebé sin que la madre pierda su estilo propio pasa por el uso de un collar de lactancia.

La lactancia también es buena para ti y no se trata de renunciar a ella porque el bebé de forma natural arañé o de tirones a los accesorios que encuentre a mano, sino de encontrar recursos que, además de facilitar el momento de la lactancia, suponen un estímulo a la vista y el tacto del recién nacido.

Teniendo siempre muy presentes los  cuidados básicos del recién nacido  este collar desarrolla su motricidad y les permite estar entretenidos llegando incluso a ser un buen mordedor cuando le comiencen a salir los dientes.

¿Dónde encontrar un collar de lactancia?

Los collares de lactancia son muy fáciles de encontrar en tiendas especializadas o en tiendas online y existe una gran variedad de catálogos. Sin renunciar al estilo y a mostrar la personalidad propia, porque existen múltiples diseños con diferentes formas y colores que consiguen que el collar parezca un complemento más. Incluso, si navegas un poco por Internet y eres algo manitas o te gusta diseñar tus propios complementos puedes fabricarte el tuyo propio escogiendo las piezas que más te gusten, lo que te permitirá también ir modificándolo con el tiempo para que no te aburras de él.

Lo más importante si te decides a fabricar tu propio collar de lactancia es que todas las piezas que compras para él sean de silicona, antibacterianas, y que el dispositivo de cierre sea totalmente seguro para que no pueda desmontarse mientras tu bebé juega y se entretiene con él.

Además estos collares no son para uso exclusivo durante la lactancia, ya que también pueden ser útiles cuando se da el biberón al bebé porque, en esos momentos, también tiende a agarrar lo que encuentre cerca y el collar puede ser utilizado por el padre, los abuelos o el cuidador.

En realidad, el collar de lactancia puede utilizarse para todos esos momentos en los que el bebé se encuentra cerca de la cara de sus padres y tiende a jugar con ella.

Por ejemplo, mientras se le lleva en una mochila portabebés, uno de los sistemas de porteo que ha sabido ganarse su espacio y que ya está totalmente popularizado por sus múltiples beneficios, ya que es ergonómico y ajustable para poder utilizarlo mientras el niño va creciendo y adaptándola así a su peso.

Por ello, durante todo el tiempo en que el bebé se encuentra en ella, puede ir desarrollando su curiosidad.