Prevención, Salud

Verrugas: qué son, qué tipos hay y cómo eliminarlas

Las verrugas no son graves, pero sí pueden ser muy molestas. Te contamos qué tratamientos existen para eliminarlas y si siempre es necesario extirparlas.

Las verrugas comunes son formaciones elevadas sobre la piel con diferentes formas y consistencia. Se originan por la infección del Virus del Papiloma Humano (VPH) un patógeno con más de 100 subtipos responsables de causar lesiones verrucosas de diferente consideración. Los subtipos más comunes de VPH están ligados a las verrugas vulgares. Estas formaciones no suelen revestir gravedad, aunque sí pueden llegar a resultar muy molestas y antiestéticas cuando crecen. Además, pueden ocasionar molestias y lesiones secundarias si, por ejemplo, rozan o se enganchan con la ropa u otros objetos.

Aunque son muy frecuentes en la edad pediátrica, las verrugas vulgares pueden aparecer en cualquier momento de la vida. Se transmiten por contacto directo con otra persona infectada o con objetos que haya utilizado alguien con verrugas (toallas, guantes, vasos…).

verrugas pies

Tipos de verrugas

  • Verrugas vulgares. Son las más comunes. Tienen forma redondeada, pueden aparecer en grupos o solitarias, y su superficie es rugosa. Se forman en el dorso y palmas de las manos, y plantas de los pies, entre los dedos y a veces en la cara, el cuello y el cuero cabelludo.
  • Verrugas genitales. También reciben el nombre de condilomas. Son de consistencia más blanda, y a veces tienen forma de coliflor, cuando son muy numerosas. Se localizan en cualquier zona del área genital (pene, vulva), en las ingles y en la región perianal. Son muy contagiosas, ya que la mucosa urogenital es más delicada y susceptible de sufrir erosiones y heriditas que facilitan la entrada del VPH. Se transmiten durante las relaciones sexuales.
  • Verrugas filiformes. De forma alargada y textura más blanda, suelen aparecer en el cuello y los párpados. Están unidas a la piel por una pequeña área. A menudo se desprenden por sí solas y es frecuente engancharlas con las uñas, las cadenas del cuello, el cepillo o el peine.
  • Verrugas subungueales y periungueales. Se denomina así a las verrugas que aparecen, bajo las uñas o alrededor de estas, respectivamente.
  • Verrugas planas. Son más frecuentes en niños y adolescentes. No sobresalen demasiado y su color suele ser más blanquecino y similar al de la piel que el resto de verrugas comunes. Son de pequeño tamaño y se distribuyen en grupos o racimos.
  • Verrugas plantares. Más conocidas como papilomas, las verrugas plantares aparecen en la planta de los pies. Esta localización hace que sean muy dolorosas por la presión del peso del cuerpo al andar o calzarse, por lo que casi siempre requieren de tratamiento que las elimine en lugar de esperar a que desaparezcan por sí solas.

Tratamientos para las verrugas

Las verrugas no siempre necesitan tratamiento específico, ya que aproximadamente un tercio de ellas desaparece espontáneamente a los seis meses de haber brotado. Además, si no causan molestias o dolor, no crecen, o si están situadas en un lugar poco visible no es estrictamente necesario eliminarlas.

No obstante, los condilomas, las verrugas vulgares, o plantares o las que sí causan molestias pueden eliminarse de diferentes maneras.

Uno de los métodos más habituales para el tratamiento de las verrugas vulgares es la aplicación de ácido salicílico, directamente en la superficie de la verruga después de haber raspado su superficie con una lima para facilitar la penetración del principio activo. Se realiza en casa por el propio paciente. También pueden ser eliminadas con frío (crioterapia), u otros agentes tópicos como la cantaridina, siempre realizados por el dermatólogo. La cirugía es una técnica prácticamente en desuso en la actualidad.

Algunas verrugas filiformes o que están sujetas por una raíz muy pequeña pueden eliminarse estrangulándola con seda quirúrgica. No obstante, este método requiere tiempo y el paciente no siempre lo acoge de buen grado. Por otro lado, la crioterapia con nitrógeno líquido o la electrocoagulación (con anestesia previa) es factible, siempre realizada por manos expertas (dermatólogo).

Si tenemos verrugas genitales, deberemos acudir siempre al dermatólogo para su correcto diagnóstico y tratamiento, puesto que se trata de una infección muy contagiosa y que además en algunos tipos de HPV puede asociarse con determinados tipos de carcinomas.

Antes de recurrir a cualquier método casero o a remedios populares es imprescindible consultar con el especialista, quien establecerá la mejor manera de eliminar las verrugas.